Perseguidera Dmente

viernes, 20 de noviembre de 2009

Cuatro Tipos de Milagros


Como puede que ya sepas, este mes (Noviembre) trata sobre la creación de milagros. Pero, ¿sabías que hay cuatro tipos específicos de milagros que puedes crear? Es importante que lo entiendas:

Milagro por acción positiva
Este tipo de milagro añade una dimensión positiva a tu vida. Por ejemplo, puede que consigas una subida de salario inesperada o que conozcas el hombre o la mujer de tus sueños; en cualquier caso, estos milagros aumentan la calidad diaria de tu vida física. La clave para traer milagros por acción positiva a tu vida es ver todos los sucesos como oportunidades en vez de obstáculos. Debes desear estas oportunidades porque te ofrecen la ocasión de trascender tu naturaleza.

¿Cómo? Los obstáculos desencadenan reacciones dentro de ti. Te preocupas. Te inquietas. Te estresas. Te quejas. Si continúas haciéndolo, puedes apostar hasta tu último centavo que los milagros no aparecerán en tu vida. Sin embargo, si te resistes al deseo de reaccionar ante un obstáculo y lo ves por lo que realmente es —una oportunidad para elevarte por encima de tu naturaleza instintiva—, un milagro de idénticas proporciones vendrá hacia ti. No lo dudes. Así es como las cosas funcionan realmente.


Milagro de eliminación
Este tipo de milagro elimina los elementos negativos de tu vida. Algunos ejemplos serían curarse de una enfermedad grave, tener un enemigo difícil que de repente se muda a una ciudad nueva (o mejor aún, ¡a otro país!) o una entrada de dinero inesperada para eliminar todas tus deudas y esas desagradables cartas legales. Estos son milagros de eliminación.
La clave para realizar milagros de eliminación es ver más allá del dolor que sientes ahora mismo. Ya sea un dolor físico, mental o espiritual en su naturaleza, todo aquello que te causa dolor también causa que reacciones a él. En esta situación, tus reacciones pueden incluir la autocompasión, sentirse como una víctima o sentir pena por uno mismo. Este tipo de comportamiento “natural” mantiene las leyes naturales del universo en su estado normal. Cuando aceptas responsabilidad por tu dolor y te das cuenta de que es una retribución por tu propio comportamiento mezquino —en esta vida o en una anterior— activas el poder de los milagros.


Milagro de evasión
Este es uno de los milagros más difíciles de reconocer, pues implica ser consciente de algo que no te ha sucedido. Que tu vuelo se retrasara al llegar al World Trade Center el 11 de septiembre sería un ejemplo dramático, pero muchos otros milagros de evasión suceden todo el tiempo. La mayoría de ellos pasan desapercibidos.
Supón que te enteras de que un amigo te ha insultado a tu espalda. Tienes buenos motivos para atacar a esa persona. Pero después de leer este artículo decides que resistirás tu deseo de venganza. Te elevas por encima de tus emociones y el dolor y tratas a tu amigo con dignidad y amabilidad. Te das cuenta de que esta es sólo la ley de causa y efecto desarrollándose por sí sola porque probablemente lastimaste a tu amigo de otra forma en algún momento previo.
¿Y sabes una cosa? Ahora tienes un milagro viniendo hacia ti, fluyendo desde el reino del 99%.
Una semana más tarde, te diriges al trabajo en tu auto. Hay otro vehículo destinado a chocarse con el tuyo cuando pases por un cruce después de que el semáforo se ponga en verde. La energía del milagro te rodea mientras esperas con el semáforo en rojo en ese fatídico cruce. De repente, decides cambiar la emisora de radio y buscar una música que te guste más. Cuando miras hacia abajo para buscar otras emisoras, no te das cuenta de que el semáforo se ha puesto en verde. Pasan unos segundos mientras buscas otra emisora. De repente, el auto que iba a chocarse contigo pasa por el cruce. Mientras tanto, encuentras una canción fantástica en la radio, levantas la mirada, ves la luz verde y sigues conduciendo sano y salvo a tu trabajo, sin saber lo cerca que estuviste del desastre.

Milagro incremental
En cierta manera, este es el tipo de milagro menos dramático, pero es igual de importante que el resto de milagros. Como la mayoría de personas, probablemente trabajes para alcanzar objetivos que quieres lograr en tu vida; este proceso puede llevar años o incluso décadas. Encontrar un esposo o esposa, construir una casa, tener suficiente dinero para viajar o convertirse en un actor o actriz de éxito son algunos ejemplos. Este milagro incremental ocurre cuando algo que debería haber tardado mucho en ocurrir, sucede antes. Un día, se presenta ante ti en la forma de amor a primera vista, un vendedor entusiasta, una gran oportunidad de negocio o una llamada de teléfono inesperada que te coloca en el centro del escenario. Esto no es simple suerte ni buena fortuna. Tú haces que suceda cada vez que te elevas por encima de tu ego y eliges ser proactivo en lugar de reactivo.

Ahora ya sabes que solo tú eres el responsable de producir todos los milagros en tu vida, y así es como Dios quiere que sea. A medida que transformas gradualmente tu naturaleza, paso a paso, liberas gradualmente tu poder de crear milagros.
Esto sucede poco a poco. Tu grado de transformación personal interna está directamente relacionado con tu nivel de habilidad para crear milagros. Si no estás atrayendo milagros, es porque eres la misma persona que eras hace diez, veinte o cincuenta años.
Sin embargo, el mismo acto de leer estas palabras está poniendo en marcha el proceso.

Este material fue tomado de la siguiente dirección: http://www.kabbalah.com/newsletters/2009_03sagittarius/spanish/yehuda.php
 
Mi sugerencia es que si les llama la atención el tema, indaguen sobre el mismo.

jueves, 12 de noviembre de 2009

Para todo lo demás, existe Master Card...

Algo que me sorprende es la capacidad que tenemos para sufrir y aguantar por amor los desprecios de la persona supuestamente amada. ¿Qué necesitamos o qué nos hace falta para estar aferrados a alguien que sabemos no nos conviene?, ¿qué, en nuestro interior, nos motiva a no dejar ir a alguien que su sola presencia nos lastima y hace que perdamos poco a poco nuestra propia identidad y autoestima?, ¿por qué sufrimos por alguien que perdimos, aún y cuando ya nos habíamos convencido que su partida era lo mejor para nosotros?
En alguna parte alguna vez leí "El amor verdadero libera, no te hace esclavo de la voluntad ni del estado de animo de la otra persona. El amor verdadero te hace ser tú y te lleva a cruzar fronteras inimaginables. Te impulsa a dar lo mejor de tí, no porque tengas a la otra persona a tu lado, sino porque esa persona te ayuda a descubrirte".
¿VALE LA PENA SUFRIR POR ALGUIEN?
¿Qué tan dispuestos estamos a sufrir por alguien?
Cuentan que una bella princesa estaba buscando consorte.
Aristócratas y adinerados señores habían llegado de todas partes para ofrecer sus maravillosos regalos. Joyas, tierras, ejércitos y tronos conformaban los obsequios para conquistar a tan especial criatura.
Entre los candidatos se encontraba un joven plebeyo, que no tenia mas riqueza que amor y perseverancia. Cuando le llego el momento de hablar, dijo:
"Princesa, te he amado toda mi vida. Como soy un hombre pobre y no tengo tesoros para darte, te ofrezco mi sacrificio como prueba de amor.
Estaré cien días sentado bajo tu ventana, sin mas alimentos que la lluvia y sin mas ropas que las que llevo puestas. Esa es mi dote..."
"Acepto: Tendrás tu oportunidad: Si pasas la prueba, me desposaras".
Así pasaron las horas y los días. El pretendiente estuvo sentado, soportando los vientos, la nieve y las noches heladas.
Sin pestañear, con la vista fija en el balcón de su amada, el valiente vasallo siguió firme en su empeño, sin desfallecer un momento. De vez en cuando la cortina de la ventana real dejaba traslucir la esbelta figura de la princesa, la cual, con un noble gesto y una sonrisa, aprobaba la faena. Todo iba a las mil maravillas.
Incluso algunos optimistas habían comenzado a planear los festejos.
Al llegar el día noventa y nueve, los pobladores de zona habían salido a animar al próximo monarca.
Todo era alegría y jolgorio, hasta que de pronto, cuando faltaba una hora para cumplirse el plazo, ante la mirada atónita de los asistentes y la perplejidad de la joven princesa, se levantó y sin dar explicación alguna, se alejó lentamente del lugar. Unas semanas después, mientras deambulaba por un solitario camino, un niño lo alcanzó y le preguntó ¿Qué fue lo que te ocurrió? ...
Estabas a un paso de lograr la meta... ¿Por qué perdiste esa oportunidad?...
¿Por qué te retiraste?...
Con profunda consternación y algunas lagrimas mal disimuladas, contestó en voz baja: "Ella no me ahorro un día de sufrimiento... Ni siquiera una hora. El merecimiento no siempre es egolatría sino dignidad. Cuando damos lo mejor de nosotros mismos a otra persona, cuando decidimos compartir la vida, cuando abrimos nuestro corazón de par en par y desnudamos el alma hasta él último rincón, cuando perdemos la vergüenza, cuando los secretos dejan de serlo, al menos merecemos comprensión".
Que se menosprecie, ignore, olvide o desconozca fríamente el amor que regalamos a manos llenas es desconsideración o, en el mejor de los casos, desinterés o ligereza. Cuando amamos a alguien que además de no correspondernos, desprecia nuestro amor y nos hiere, estamos en el lugar equivocado.
Esa persona no se hace merecedora del afecto que le prodigamos.
La cosa es clara: si no me siento bien recibido en algún lugar, empaco y me voy. Nadie se quedaría tratando de agradar y disculpándose por no ser como les gustaría que fuera. No hay vuelta de hoja: en cualquier relación de pareja que tengas, no te merece quien no te ame, y menos aun, quien te lastime. Y si alguien te hiere reiteradamente sin "mala intención", puede que te merezca pero no te conviene. Retirarse a tiempo con la satisfacción de haber dado lo mejor de nosotros mismos no tiene precio..!

miércoles, 11 de noviembre de 2009

Histeria Greciosa

Hablando de Historia, alguna cosa debe haber quedado de lo que leí alguna vez... Creo.

Diccionario de Mitología Griega Parcial
(adaptación libre y disociada)


Agamenlon: Rey perezoso que todo quería que se lo hicieran los demás (idem a algunos con ilusión de poder).
Alejandro Mango: Antiguo gobernante, fácil de agarrar.
Antenas: Nombre que le daban antes a Atenas. Polis inalámbrica, tipo wifi.
Apenas: Nombre de Atenas cuando sólo era una pequeña aldea.
Aquímedes: Matemático e inventor que jamás salía de su casa. "Aquí me ves" era su frase célebre.
Ariscócteles: Filósofo griego de carácter arísco, inventor del Margarita.
Aristónteles: Filósofo discípulo de Platonto.
Arquiloco: Maestro mayor de obras.
Atlas: Titán condenado a hacer todos los mapas.
Caronte: Barquero que cobraba un precio abusivo por atravesar la Laguna estigia. Santo patrono de las modernas líneas aéreas.
Cocorintio: Antigua capital de las gallinas.
Colimpio: Parque infantil situado en los jardines del Parnaso, donde los dioses se divertían como niños.
Cuales de Mileto: Amigo íntimo de Tales de Mileto.
Demogracia: Versión de prueba de un juego de humor al que se sigue jugando en nuestros días.
Demósteles: Filósofo griego nacido en una polis al sur de Madrid.
Diógenes: Primer donante de semen de la historia.
Efeo: El más desagradable de los mares griegos.
Empédocles: Filósofo griego cuya tesis era que el universo estaba formado por cinco elementos: fuego, aire, tierra, agua y... vino. Ver Pisístrato.
Empeñócles: Filósofo griego experto en Montes de Piedad.
Epícuro: Remedio de uso tópico.
Espanta: Nombre dado a Esparta por sus temerosos enemigos.
Espartapájaros: Artilugio usado en Esparta para espantar cuervos.
Esquilo: Creador de tragedias griegas para ovejas. Inventor de la balanza.
Estoy K.O.: Término acuñado por una renombrada escuela filosófica. Dícese al que enseguida dejaban grogui en los asaltos ideológicos y por ello, adoptaron la teoría del sufrimiento con paciencia.
Gracia: Chiste de Grecia.
Grecioso: Humorista griego.
Herodocto: Cultísimo historiador.
Herodotro: Otro historiador.
Hipócrater: Eminente benefactor de la humanidad con su medicina y todo ello, a pesar de su carácter volcánico y sulfuroso.
Hipócrites: Médico célebre por fingir lo contrario a lo que sentía.
Homero: Mítico escritor de la ciudad griega de Springfield. Poeta ciego que se asombraba cuando pescaba un mero, de ahí su nombre. Poeta griego, continuador de las obras de Clavículo y predecesor de Cúbito y Radio.
Homeroteca: Colección de obras de Homero, clasificadas por temporadas.
Iluso: Héroe de la guerra de Troya que pensó que regresaria a su patria, Ítaca, en pocos meses y tardó 10 años; fue toda una Odisea.
Jejenofonte: Creador de la risa sarcástica.
Mininotauro: Monstruo con cabeza de toro y cuerpo de gatito.
Nereidas: ninfas que venian en lata.
Olimpia: Letra pulcra.
Olimpiada: certamen de limpieza en que se competía por eliminar la roña acumulada durante cuatro años.
Olimpopó: Caca divina.
Olvidio: De éste no me acuerdo muy bien...
Partenón: Templo donde se inventaron los números quebrados. Lugar de origen de las pesadillas de los adolescentes.
Pegasus: Caballo pegajoso.
Pentatlón: Pantalón de cinco piernas o pantalón pulpero.
Perseveréfone: La más perseverante de las hijas de Zaeús.
Pintágoras: Mítico pintor griego que decoró los edificios del ágora ateniense con motivos numéricos repetidos.
Pisístrato: Ver Empedócles.
Pitágolas: Famosos arbitro de las olímpiadas que era proverbial en su rigor arimético a la hora de cuantificar medidas y records de los atletas.
Pitágoras: Inventor del cigarrito o cigarro hipotenuso.
Plactón: Filósofo estudioso de los diminutos organismos animales y vegetales que flotan en el mar.
Plantón: Filósofo que siempre dejaba a los otros esperando por horas. Antepasado de mi gran amigo romano Auchgusto Jaramillo.
Plastón: Filósofo extremadamente pesado.
Platóntico: Amor de un tonto con una lista. Ver Plantón y antepasado de amigo romano.
Poloponeso: Región al sur de Grecia, famosa por sus helados.
Repitágoras: Matemático que nunca logró pasar el segundo grado.
Socráter: Filósofo volcánico.
Socráteres: Filósofo griego, primer estudioso de los volcanes.
Solón: Griego que no pronunció la frase: "Sólo sé que no sé nada".
Teles de Mileto: Primer fabricante de televisores de la antiguedad, célebre por su demostración de que dos segmentos de audiencia de un canal son proporcionales a los dos segmentos de audiencia correspondientes a otro canal, cuando los programas son para lelos.
Vacantes: Plazas que siempre eran ocupadas por las enchufadas de los dioses.
Zenón: Filósofo griego famosos por la cantidad de alimentos que ingería en las cenas.
Zezeus: Dios tartamudo con fuerte acento español.

lunes, 2 de noviembre de 2009

¿Quieres que te cuente el Cuento del Gallo Pelón?


Siempre me ha apasionado la Historia. Claro que cuando estaba en la secundaria, no le veía el menor sentido práctico a ocupar espacio en mi memoria con fechas de batallas, cuando debía aprenderme el último paso de baile...
Con el pasar de los años veo al respecto medias tintas con aroma a lugares comunes o verdades relativas: que si insistir en recordar el pasado y traerlo al presente no es un modo de avanzar... Que si la cultura que no es capaz de recordar su pasado y aprender de el, está condenada a desaparecer... Pero eso, sí: recordar y avanzar, puesto que si traemos el pasado al presente y nos quedamos allí, también estaremos destinados a desaparecer.
Las naciones se construyen, destruyen, reconstruyen y evolucionan a través de su historia pasada.
Según una definición, la historia es un registro de los acontecimientos del pasado del hombre. Por supuesto, hay más de una manera de considerar esa historia. Por una parte, se dice que los que rehúsan aprender del pasado están condenados a repetirlo. Por otra parte, muchos aseguran que la historia es palabrería vana. Y fíjense que hay algo de verdad en ambas opiniones. Si una persona puede aprender del pasado para evitar errores y dirigir su vida de un modo prudente, la historia le ha sido de beneficio. Sin embargo, la historia puede usarse para extraviar: hace apenas una generación, los nazis usaron una versión tergiversada de la historia para tratar de fortalecer su mito acerca de la "raza superior" germánica. Esto contribuyó a la muerte de millones de personas. Para beneficiarse de la historia, uno tiene que tener una perspectiva apropiada del pasado. La pregunta del millón es entonces: ¿cómo se obtiene la dichosa perspectiva?
La importancia de la historia es que a través de ella podemos volver al pasado y comprender también nuestro presente. Ahora bien, sobre la objetividad o no de la perspectiva empleada... eso es complicado. Siempre los historiadores tienden a tener al menos simpatías u odios por algún personaje o proceso, aunque claro está existen historiadores serios que hacen el esfuerzo de ser honestos, también hay lo contrario: los que más que ser historiadores son "activistas políticos-ideológicos. Uno de los principales beneficios que trae consigo el estudio de la historia es la creación de un sujeto consciente de la época que le tocó vivir, crítico del pasado y del presente.
Yo me adhiero a la teoría de la historia inmediata. Por lo tanto, cuando lean este post, ya será historia...